Coxiella burnetii es una bacteria intracelular, Gram negativa, que puede sobrevivir en el exterior de las células formando un cuerpo similar a una espora resistente y muy virulenta.
Coxiella burnetii es resistente a pH ácido, temperaturas elevadas, a la refrigeración y congelación, a concentraciones elevadas de sal (salinidad 10%) y a la desecación. Por lo tanto, puede sobrevivir largos periodos de tiempo en condiciones extremas, pero se elimina con tratamientos térmicos como la pasteurización. La temperatura óptima de crecimiento es de 37 ºC, el pH óptimo se encuentra entre 6 y 8, con un pH mínimo de 4, y la actividad de agua (aw) mínima para su crecimiento es de 0,98.
Coxiella burnetii es el organismo causante de la fiebre Q en humanos, y su reservorio son los mamíferos (domésticos y salvajes), las aves, los reptiles y los artrópodos (garrapatas), y todos ellos pueden ser portadores asintomáticos. La fuente principal de la infección de la fiebre Q son los rumiantes (bovinos, ovinos y caprinos), a los que la infección provoca una enfermedad leve, pero que puede llegar a provocar abortos al final de la gestación.