Escherichia coli es una bacteria Gram negativa, en forma de bacilo que pertenece a la familia Enterobacteriaceae. Es parte de la flora intestinal normal de los seres humanos y otros animales de sangre caliente. No obstante, algunas cepas de E. coli son capaces de causar enfermedad. Existen cuatro clases reconocidas de E. coli enterovirulentas: i) Enterotoxigénica (ETEC): producen toxinas que inducen la secreción de fluidos. La etiología de esta enfermedad es similar al cólera. ii) Enteropatógena (EPEC): el mecanismo de virulencia es similar a la de Shigella dysenteriae. iii) Enteroinvasiva (EIEC). iv) Verocitotoxigénica (VTEC): no todos las cepas atacan los humanos; las especies que causan diarreas hemorrágicas a los humanos, como E. coli O157:H7, forman el subgrupo de las E. coli enterohemorrágicas (EHEC)1, 2, 4, 6. ETEC: Es necesario una dosis relativamente grande (100 millones – 10 mil millones de bacterias viables para establecer la colonización del intestino delgado. Los lactantes pueden adquirir la infección con dosis menores. EPEC: Son altamente infecciosos para los niños y la dosis es probablemente muy baja. En los pocos casos documentados de enfermedades en adultos, la dosis se estimó en 106 células.
Se piensa que es de tan solo 10 células (similar a Shigella spp.) 1, 2.